Mérida, Abril Miércoles 17, 2024, 03:29 pm
“Si quieres
la paz, prepárate para la guerra”, se trata de una frase abominable paradójica,
obscena, absurda, blasfema, infeliz, y hasta una herejía moderna puesto que la
paz implica ausencia total de guerra, y se atribuye al romano Flavio Vegecio
Renato (383-450), de su obra, en latín, “De
re Militari” (Acerca de asuntos militares), máxima divisa y/o bandera de
las dos superpotencias (Rusia y EEUU) que aceleran la carrera del armamento
convencional, su perfeccionamiento y su difusión, que afectan más a la
seguridad internacional que a la propia carrera nuclear, según informe del IEEE,
en lucha por la hegemonía mundial, a la cual debemos incluir, además, a China.
El papa
Francisco ha aseverado: “la guerra en Ucrania es un ultraje a Dios e idolatría
del poder”.
Recordamos,
de nuestra época de formación académica, una homilía del excmo mons Ramón I.
Lizardi, entonces obispo castrense, cuando manifestaba: “mal podemos limpiar la
sangre con más sangre, pues atraeríamos resentimientos y revanchismo,
sobremanera.
La UE, ONU,
el CICR y la Media Luna Roja para Europa estarían obligadas a mediar con la
finalidad de lograr, definitivamente, un “alto al fuego” entre ambas naciones
beligerantes, pues de extenderse tal conflicto, el costo de la factura, que
sube a diario, será oneroso e impagable tanto para la eurozona, así como para
occidente.
Caracas,
Venezuela