Mérida, Marzo Viernes 21, 2025, 02:24 pm
CNP: 2229
Ya en el mes final del año, que ha transcurrido en un santiamén, preparándose todos, en la medida de sus disponibilidades, para disfrutar en lo que cabe, lo de las festividades por la Navidad y advenimiento de un Nuevo Año, se quisiera en este país y por ende, en esta entidad andina venezolana, tener la alegría de contar con eficientes servicios básicos, con excelente atención médica en los hospitales y ambulatorios, CDI, en fin, que las dificultades y vicisitudes diarias que se enfrentan y constituyen un constante desafío para sobrevivir en la cruda y aguda crisis socio económica política que agobia a los venezolanos, desaparezcan, vivir y convivir como debería ser.
Es la realidad que se tiene por delante. Un constante desafío, que algunos para no decir todos no superan y ante la aproximación de la Navidad y arribo del 2024, en este ancho territorio nacional, todos sin distingo de clase y posición, hasta aquellos que se desgarran las vestiduras en pro del país, con sus caras más falsas que la falsedad, tienen la esperanza que el Niño Dios traiga la paz, cese la confrontación, prevalezca realmente la unidad nacional, mejoren los ingresos laborales familiares por demás super insuficientes para cubrir gastos esenciales, mejore la educación como pilar fundamental para la sociedad, cese la violencia de género y paremos de contar.
Es el constante desafío, que se afronta en la Venezuela y por supuesto, en el estado Mérida de hoy día, que no puede negarse ni pretender ocultar, a la vista está, la situación crítica que se padece, se tiene por delante, sin pretender ser alarmista y empeñar los posibles preparativos por la Navidad y arribo del Nuevo Año, esperanzados todos están, en que el regalo del Niño Jesús a Venezuela entera sea contar con el país que todos queremos y anhelamos, ojalá sea así.