Mérida, Marzo Sábado 22, 2025, 05:21 am
Hablamos del hombre que se hizo enseñanza y guía del periodismo falconiano, llamado “El Maestro” por los periodistas de generaciones posteriores. Nació en la aldea Tatarí, Churuguara, municipio Federación del estado Falcón el 16 de marzo de 1926. Sus padres fueron Genoveva Hernández y Pedro María Arteaga. Sus hermanos fueron: Adela, Pedro Rafael, Rafael Ramón, Virgilio Primitivo, Francisca, Pedro María, Pedro Alcántara, Galo José y María Genoveva.
Se casó con Mirna Teresita Almena, y tuvo cinco hijos.
Tuvo dos hijos anteriores al matrimonio. Una de las hijas de Virgilio Arteaga
Hernández, María Asunción Arteaga Almena, también ejercería el periodismo.
Virgilio, al principio, se sintió atraído por la
recién pujante aventura petrolera. En Bachaquero, estado Zulia, fue contratado
por la Venezuelan Oil Company. Sin embargo, no duró más de un año, y en 1947
volvió a Churuguara para iniciar su oficio periodístico. Colaboraba al
principio en una gaceta literaria, y ese mismo año decidió meterse de lleno en
el periodismo, el cual ejerció hasta los últimos días de su vida.
En sus pininos del periodismo, fundó un bisemanario
que llegó a titular “La Idea”, del cual manifestaba que estaba inspirado en una
de las primeras películas norteamericanas de la época del cine mudo en la que aparecía
un diario, cuyo director combatía con denuedo en defensa de la verdad y del
interés colectivo.
Ese hombre que llegó desde aquella aldea de la sierra
de Falcón, Virgilio Arteaga Hernández, construyó una historia como de las que
han marcado tantos hombres y mujeres de la Venezuela honesta y trabajadora, la
de la ética y la verdad. Así le tocó a este gran periodista venezolano, quien antes
de dedicarse al periodismo fue agricultor, obrero petrolero, empleado del poder
judicial y oficinista. Así lo dejó expuesto en una entrevista realizada por el
colega Iván Sierra Ramírez. En sus palabras, le señalaba que mantener un
periódico en Falcón o en cualquier parte del interior del país es una gran
hazaña, porque se entiende la publicidad no como un mecanismo de venta de
imagen o productos, sino como una dádiva o colaboración al medio, y por ello
siempre se han confrontado serios problemas económicos.
Subrayaba que mantener un periódico en la provincia o
en el interior del país, es un gran esfuerzo para quienes editan “La Mañana”, “Médanos”
y “Polémica” para ese entonces, de aquellos años y en la actualidad. También
ahora, en mi opinión que también otros medios como “El Falconiano”, “La
Prensa”, “Nuevo Día”, y “Coro Hoy”, así sean medios digitales y las emisoras de
radio y Televisión, necesitan el apoyo del sector comercio y de la sociedad.
En su actividad gremial, Virgilio Arteaga Hernández
mantuvo ese espíritu incansable por conseguir muchas reivindicaciones para los
periodistas falconianos, tales como la jubilación la hospitalización y la vivienda.
En toda su lucha está el haber de la construcción de la Casa del Periodista de
Paraguaná, además de haber presidido la Asociación Venezolana de Periodistas, seccional
Paraguaná durante el periodo 1959-1960, y luego dos veces más, cuando ya era el
Colegio Nacional de Periodistas (CNP) en la seccional de Punto Fijo por
aclamación de sus miembros entre 1979 y 1980, porque el que trabaja por sus
afiliados tiene derecho a seguir al frente de su gremio. Por ello, se ganó el
apoyo de los periodistas en Paraguaná.
Por otra parte,
decía Virgilio Arteaga Hernández que “El hombre, cuando lo buscan para servir a
su gremio… y a su comunidad, debe
hacerlo aunque tenga que hacer grandes sacrificios para cumplir con el
trabajo diario que produce el sustento familiar...”. Por otro lado, señalaba
que su carrera periodística la inició en el diario “La mañana” de Coro por allá
en los años 40, y empezó haciendo periodismo de opinión a través de varias
columnas sobre aspectos comunales, y más tarde se desempeñó como corresponsal
en Paraguaná del “Diario de Occidente” de Maracaibo, como redactor del diario
“Médano” de Punto Fijo, además de ser reportero del diario “El Universal” y “Panorama”.
Fue corresponsal del diario “Crítica”, y en sus últimos tiempos era corresponsal
del diario “El Nacional”.
En su opinión sobre el periodismo falconiano, hablaba
sobre su evolución, pero frente al escepticismo, decía: “queremos que el
periodismo proyecte su luz sobre nuestros pasos de aquellos que vivieron lo que
pareciera repetirse frente al siglo XXI”.
Arteaga Hernández también se dedicó a la investigación
histórica, y también realizó reportajes periodísticos e históricos. Como
miembro del Centro de Historia del estado Falcón, se llegó a incorporar con un
trabajo que versaba sobre aquella contienda bélica que hubo en el país,
denominada “Guerra Libertadora”, liderada en Falcón por el General Gregorio
Segundo Riera. Además, se dedicó a escribir el proyecto sobre “Zona Franca
Industrial de Paraguaná, Historia, Justificación y Realidad”. También para ese
tiempo tenía un libro inédito que no se si llegó a publicarse: “Paraguaná, Historia,
Geografía y Estadísticas”. Notable fue su contribución al conocimiento de
algunos procesos históricos en Falcón a las nuevas generaciones como sus
estudios sobre la Emancipación de la Revolución Federal y demás hechos
trascendentales en la vida republicana de Venezuela.
Este ilustre periodista e historiador contó una vez
que se había encontrado en la población de San José de Cocodite, población cercana
a Pueblo Nuevo de Paraguaná, con unos parientes del general José del Rosario
González, quienes le mostraron unas cartas inéditas del Mariscal Juan
Crisóstomo Falcón dirigidas a su ministro de Guerra, general José del Rosario
González, quien había sido su más cercano colaborador; y que esos documentos
nunca pasaron por las manos de los historiadores por pertenecer a las familias
debido al celo de su patrimonio y el valor que tenía para la historia de Falcón
y para la causa de la Guerra Federal.
Expresaba que esos documentos daban a conocer las
angustias vividas por el mariscal Falcón en los últimos días de su vida política
a partir de 1864, cuando asumió la presidencia de la República. Tan importante fue
ese aporte en la historia de los falconianos a la causa de la Guerra Federal.
Allí se planteaba, entre otras cosas, el acceso al poder de los hombres de la
provincia antes de la guerra de la federación, ya que para ser presidente,
ministro, magistrado o cualquier otro cargo de importancia, debía de pertenecer
a la oligarquía central, por la cual la Guerra de la Federación logró la
integridad social, la cual señalaba se había venido opacando poco a poco en la
sociedad venezolana.
Por otra parte, señalaba Virgilio Arteaga Hernández,
que la descentralización se explicaba con el ejemplo mismo del general José del
Rosario González, quien era un simple fajinero en el hato “Aguaque”, en
Paraguaná, en la casa natal de la heroína Josefa Camejo, y que por sus
invalorables méritos en la Guerra de la Independencia, se hizo en la carrera
militar y llegó a ser lugarteniente del mariscal Falcón y ministro de Guerra
durante el gobierno de Juan Crisóstomo Falcón.
Para Virgilio
Arteaga Hernández siempre fue una gran preocupación el desarrollo integral del
periodismo en nuestro país, con buenas escuelas y buenos profesores, ya que la
vocación y la creatividad fueran siempre de la mano, porque el periodismo no es
una carrera para hacerse rico, sino para servir a la colectividad; para educar
a una comunidad y para mantener informada y orientada a una sociedad, por lo
que podríamos decir en estos tiempos, que informar no es un delito, y ser
periodista no tiene nada que ver con ser terrorista.