Mérida, Enero Sábado 18, 2025, 04:27 pm
(Prensa HCDV /
CNP 11842 / Mérida, 10 de marzo de 2024) En la Capilla Universitaria, sede
de la parroquia “Jesús Buen Maestro” se celebró, este domingo, la eucaristía de
Acción de Gracias por el 10º aniversario de la fundación del Hospital Clínico
del Valle (HCDV) la cual fue presidida por Monseñor Helizandro Terán Bermúdez,
Arzobispo Metropolitano de Mérida, y concelebrada por Monseñor Luis Enrique
Rojas Ruiz, Obispo de la Diócesis de Punto Fijo y contó con la presencia de
integrantes del clero merideño y del equipo de trabajo de este importante
centro asistencial.
La Capilla Universitaria, revestida de flores color
blanco, llenas del público que colmó sus amplios espacios sintió los acordes
del coro “Padre Ugo Anzil” de la
parroquia Santiago Apóstol de la Punta al ritmo de la solemnidad impuesta en
esta misa de Acción de Gracias “todo lo
que la Iglesia hace: labor educativa, labor de salud, labor de acompañamiento,
es algo que nace de nuestro compromiso y responsabilidad con el mandato de
Jesús de amar y, de manera muy particular, a los más pobres y necesitados,
porque los pobres son el rostro fehaciente de Cristo”, indicó Monseñor
Terán Bermúdez.
“Nos sentimos
muy contentos por este
10º
aniversario del Hospital Clínico del Valle”
Ya durante el desarrollo de la homilía, el Arzobispo
de Mérida, señaló que “nos sentimos muy
contentos por este 10º aniversario del Hospital Clínico del Valle. La doctora
Zenahir Navarrete siempre ha sido una persona muy cercana a nuestra
Arquidiócesis. Ha ayudado y apoyado a muchos sacerdotes en momentos de
dificultades así como a tantas personas pobres y necesitadas. Yo, en esta
Eucaristía, he dado gracias a Dios por el Hospital Clínico del Valle y, sobre
todo, le he dado gracias a Dios por el personal médico que tenemos hoy en el
Día del Médico venezolano”, apuntó.
Al terminar sostuvo “la Iglesia no está llamada a suplir las obligaciones que tiene el
Ejecutivo Nacional, el Gobierno, sea el que sea, el que esté. La iglesia no
compite con ningún organismo del Estado ni con ningún organismo privado la iglesia,
simplemente, lleva adelante su trabajo movido por el amor a Cristo y por el
amor al hermano, al prójimo”.
Por su parte Mons. Luis Enrique Rojas Ruiz, Obispo de
la Diócesis de Punto Fijo, destacó la labor de los médicos en medio de tantas
dificultades en el marco de la celebración del Día del Médico Venezolano y,
luego, sostuvo la importancia que significa el Hospital Clínico del Valle para
Mérida y para toda esta parte del país “no
podía dejar pasar desapercibido este momento. Sí, en el momento que la doctora
me llamó, me hizo la invitación y bueno, me moví desde allá para compartir este
momento tan importante para los merideños y para todos quien hacen de este
Hospital Clínico su centro de salvación, de cura, de encuentro”, precisó
Mons. Rojas Ruíz.
“Miramos a
cada paciente que allí llega con amor, con ternura,
con la mirada
clara sabiendo que allí está Jesús”
Finalmente, la Dra. Zenahir Navarrete, presidenta de
la Junta Directiva del Hospital Clínico del Valle, señaló que el momento recoge
toda esta hermosa experiencia la cual “nos
ha hecho diferentes en la atención a los pacientes y, en nuestra institución,
miramos a cada uno de los que allí llegan con amor, con ternura, con la mirada
clara sabiendo que allí está Jesús en cada uno de ellos y, por eso, nuestro
trabajo es cada día más exigente para hacerlo bien, para ser instrumentos de Él
con sabiduría, con academia, con experiencia para poder restablecerlos bien
aportando, también, a esta sociedad merideña, queriendo a Mérida, queriendo
hacer mejores cosas, grandes cosas porque así lo pide la vida, así lo pide
Venezuela y así lo quiere Dios”.
Más adelante sostuvo que “somos sus instrumentos, estoy convencida que ese es el camino, los
invito a todos a participar, a unirse, a traer ideas, a ver cómo hacemos
mejores cosas por nosotros, por la vida, por Mérida y por Venezuela” para
terminar citando una frase de la Madre Teresa de Calcuta “quien no vive para servir, no sirve para vivir, es nuestra inspiración
permanente en el Hospital Clínico del Valle y en la mía en lo personal”