Participación de los laicos en la economía de 2025 por Rafael Martínez Nestares
La relevancia de los laicos en el mundo de la economía es fundamental, toda vez que ello, sin lugar a dudas, contribuirá a unas condiciones sociales más equitativas y más justas. Es evidente que, los principales retos son en todo momento, concertar los aspectos morales y éticos con los requerimientos dentro de una economía de mercado mejor y más justa.
El papel que podemos llevar adelante los laicos, en la economía, durante este año y en todo momento debe estar incurso en una economía solidaria y sostenible en 2025 y siempre, toda vez que el sostenimiento económico no es una mera disquisición entre estados vivenciales, sino ante la lectura del evangelio puesto en práctica de la vida misma y sus valores. De esta manera, los laicos estamos en la obligación a desenvolvernos en un liderazgo, profesional y empresarial, que contribuya al bien común y evada actos corruptos e ilícitos. Así como las iniciativas y el éxito de proyectos que deben orientarse a la capacitación en estos ámbitos para promover la solidaridad y la conciencia social. En este mundo de globalización y alta competitividad es indispensable para los laicos que integremos los valores de nuestra fe con nuestros principios cristianos para cada toma de decisiones económicas en el espectro de nuestro desempeño.
Los laicos debemos transmitir un mensaje a la sociedad en relación con el consumo responsable, la justa distribución de los recursos y la promoción de una economía inclusiva, esto constituye un aporte invaluable a nuestra labor para el año 2025.