Mérida, Mayo Miércoles 01, 2024, 05:18 pm

Inicio

Opinión



Desde mi Parroquia

“Nuestros presbíteros en la pandemia” por Padre Edduar Molina Escalona

Diario Frontera, Frontera Digital,  Padre Edduar Molina Escalona, Opinión, ,“Nuestros presbíteros en la pandemia” por Padre Edduar Molina Escalona
Padre Edduar Molina Escalona


Nuestra Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) ha tenido a bien “reunir, de manera online, a los pastores de almas de todos los rincones del país en el “Encuentro virtual conjunto de Obispos y sacerdotes”, por medio de la gran sala zoom, hemos podido conocer y compartir de cerca "su vivencia y ejercicio ministerial durante el tiempo de la pandemia".


 


Encuentro dirigido desde la sede de la CEV, en Caracas, los días 19 y 20 de enero, verdadero reencuentro, animación e intercambio de iniciativas nacidas al calor de este nuevo desafío mundial: La pandemia unida a la grave crisis en todos los órdenes que afronta nuestro país.


 


El inicio de tan importante Encuentro estuvo marcado por las palabras de comunión y cercanía de nuestro Santo Padre Francisco, quien nos animó a “seguir adelante, trabajando con gozo y decisión” en nuestra labor pastoral a través del testimonio de amor y de servicio para llevar la fuerza de la palabra de Dios y la eucaristía a los enfermos y al personal médico que asiste a los pacientes en esta pandemia. Con un especial agradecimiento a nuestro clero nacional que “en medio de tantas dificultades que agobian a nuestros hermanos”, entrega todo por un mayor servicio al pueblo de Dios.


 


Además de dejarnos una recomendación importante: “No podemos actuar solos, aislados, autosuficientes, con agendas encubiertas. Es indispensable que volvamos siempre a Jesús, que nos reunamos en fraternidad sacramental, para contarle y contarnos entre nosotros todo lo que hemos hecho y enseñado, con la convicción de que no es obra nuestra sino de Dios. Él es quien nos salva, nosotros solo somos instrumentos en sus manos”, afirmó el Papa.


 


A lo largo de las jornadas, tuvimos espacios para orar como presbítero de una Venezuela que reclama pastores a una intensa vida espiritual que nos impulse a vivir con mayor entrega y alegría, junto a un pueblo que sufre pero que se niega a perder la esperanza.


 


El Obispo de San Carlos, Mons. Polito Rodríguez, nos dirigió una importante reflexión, iluminada por el Evangelio de Marcos (5,21), sobre la hija de Jairo en Cafarnaúm: “Todos en medio del alboroto pensaban que la niña estaba muerta, y solo estaba dormida”. Nos decía que hoy Jesús continúa invitándonos a no perder la calma, animar la fe, a creer de verdad en Él. Hoy Jesús nos sigue diciendo a cada uno de nosotros, como consagrados “a ti te lo digo, levántate”. Sólo si nos dejamos reanimar por esa fuerza viva del Señor podremos reanimar nuestras comunidades parroquiales y cada una de nuestras diócesis.


 


Resultó muy enriquecedor el compartir de experiencias de sacerdotes que tuvieron que afrontar la dura crisis del coronavirus. Testimonios con palabras hondas como: “Muchos se llenan de miedo, pero Dios invita a confiar en él. Traté de hacerlo, lo puse todo en sus manos” (…) “Siempre me he confiado en las manos de la Santísima Virgen María y sé que ella estuvo a mi lado consolándome y secando mis lágrimas” (…) “Este tiempo fue para mí un tiempo de reflexión sobre mi humanidad y espiritualidad. Dios me ha dado una nueva oportunidad de vida”. Entre otros hermanos que nos alentaron a “cuidarnos para cuidar a nuestros fieles”. Viviendo desde la fe que ilumina y nos da la esperanza a en el Resucitado.


 


Las preguntas claves de encuentro centraron su atención en: ¿Qué ha significado este tiempo de emergencia para cada uno de nosotros sacerdotes? ¿Cómo hemos vivido este tiempo? ¿Qué sugerencias ofrezco para este tiempo? (…)


 


Dentro de las realidades planteadas, como retos para una nueva pastoral en tiempos de pandemia tenemos la imposibilidad de poder brindar la atención pastoral cotidiana a nuestras comunidades y grupos eclesiales. “No estábamos preparados para afrontar esta situación ni formados para lidiar con estas condiciones”; sin embargo, ha sido un tiempo maravilloso para la creatividad pastoral, tiempo de gracia para acrecentar nuestra vocación con mayor intensidad en la oración, eucaristía y contemplación. La cuarentena nos ha permitido encontrarnos con nuevos espacios como las redes y medios de comunicación que ahora son aprovechados para evangelizar. Un tiempo privilegiado para dar esperanza acompañando más de cerca rostros y familias concretas, para ser en verdad una Iglesia en salida.


 


Casi al final del encuentro no podían faltar las palabras del Señor Nuncio Apostólico Aldo Giordano, resaltando la palabra “esperanza”, y la comunión que experimentamos con la Iglesia Universal a partir del mensaje del Papa Francisco.


 


Para concluir Monseñor José Luis Azuaje Arzobispo de Maracaibo y Presidente de la CEV nos invitó a no perder el norte en tres aspectos claves: “La misión evangelizadora, la vivencia de la fraternidad y la actitud de esperanza”. Poniendo énfasis en la necesidad de acompañar y animar los procesos de evangelización, junto al crecer en la fraternidad sacerdotal, así como de vislumbrar el horizonte de futuro con alegría y con mucha responsabilidad, reconociendo que no faltará la cruz a la que siempre el Señor nos invita a llevar con la esperanza puesta en su amor que todo lo puede.


 


Quiera Dios que experiencias como estas se repitan para seguir animando este gran equipo fundado por Jesucristo: Su Santa Iglesia, ahora llena de vida, ilusión y encuentro: La Familia, a la que estamos llamados a dar todo nuestro servicio de entrega y amor.


 


Mérida, 31 de enero de 2021






Contenido Relacionado