Un país sin trabajadores es un país sin movimiento laboral
Aquella noche del 4 de marzo de 1985, es asesinado
el destacado dirigente sindical venezolano Henry Francisco de Jesús Croes,
mejor conocido como Hemmy Croes, autor de uno de los primeros estudios sobre el
movimiento obrero venezolano. Ese asesinato del que convirtieron en “pasional”,
se perpetró con tres impactos de bala que cegaron la vida de un hombre dedicado
al sindicalismo honesto y reivindicativo del movimiento obrero venezolano.
Hemmy llegaba a su residencia, y frente a la puerta de su casa fue impactado
por las balas asesinas en su vivienda ubicada en la parroquia San Agustín del
Norte.
El dirigente sindical Hemmy Croes nació en la
Victoria, estado Aragua, el 19 de noviembre de 1930. Fue miembro principal del Comité
Central del Partido Comunista de Venezuela (PCV), y de la comisión sindical
nacional.
Henry Francisco de Jesús Croes fue autor de uno de
los primeros estudios sobre el movimiento obrero en Venezuela. Este líder
sindical venezolano, mejor conocido como Hemmy Croes, era pariente del político
arubeño Betico Croes.
Hemmy comenzó sus estudios de Farmacia en la
Universidad Central de Venezuela.Debido
a su lucha por la conquista de los derechos de los trabajadores, abandona la
carrera, y se hace dirigente del histórico partico Comunista de Venezuela.
Entra en la clandestinidad, y ejerce esas actividades contra la dictadura
militar de Marcos Pérez Jiménez. Esto hace que Croes sea perseguido y va a
parar a la cárcel -como hacen todas las dictaduras al someter a cualquier
dirigente que se oponga a sus políticas hambreadoras y de corrupción-. Hemmy
Croes va a jugar un papel primordial en favor de la clase trabajadora
venezolana, pues va a organizar el sindicato de trabajadores de la General
Motors de Venezuela (1959), por lo cual va a ser uno de los fundadores de la
industria automotriz en Venezuela.
Croes va a
unificar el Comité Sindical Unificado para la reconstrucción del movimiento
obrero venezolano.
Hemmy Croes integra la Convención Constituyente de
la Federación unificada de trabajadores del Distrito Federal y del estado
Miranda, en la que es electo como secretario general, y va a integrar el
Consejo General de la Confederación de trabajadores de Venezuela (CTV), la cual
vendría a jugar un papel principal en el liderazgo del movimiento obrero y
político.
Hemmy Croes deja su legado como hombre honesto
sincero y responsable en estos tiempos de falsos líderes, y de falta de ética
en la política actual venezolana. Hemmy Croes se hace miembro principal del comité
central del Partido Comunista y de la comisión sindical nacional. En 1963 es
detenido por la policía política de aquel entonces, la Digepol, durante el
gobierno de Rómulo Betancourt (1963), motivo por el cual va a ser enjuiciado y
encarcelado entre 1963 y 1969.
Al quedar en libertad, se reincorpora al
movimiento sindical, y en el que figura como parte de la directiva de la
Central Unitaria de Trabajadores de Venezuela (CUTV) en 1972, y luego en 1973
publica su obra El Movimiento Obrero Venezolano. Según algunos
historiadores, Croes es pionero en este trabajo de investigación sobre el
sindicalismo venezolano.
Fue miembro del buró de la Federación Sindical
Mundial, y presidente de la CUTV en 1981. Su asesinato frente a la puerta de su
vivienda fue dado a conocer bajo un móvil pasional y no como un asesinato
político, lo que llevó al Partido Comunista de Venezuela a solicitar una
investigación que nunca aclaró los hechos.
Hemmy era un rival desde la política sindical
venezolana. Pedro Ortega Diaz, diputado que se encargó de mostrar la
inoperancia de la investigación, recalcó que este asesinato era político. Poco
antes del asesinato, Croes organizaba a nivel nacional e internacional el
encuentro entre la Central Latinoamericana de Trabajadores (CLAT), de origen
socialdemócrata, y el Comité Unificado Sindical de Trabajadores de América
latina (de Orientación Marxista) CEPUSTAL.
