Papa León XIV condena el “odio antisemita” y valora los "pasos significativos" en negociaciones de Gaza
Papa León XIV condena el “odio antisemita” y valora los "pasos significativos" en negociaciones de Gaza
Durante su Homilía de este domingo, el pontífice también envió un mensaje a los migrantes
El papa León XIV denunció este domingo el surgimiento del “odio antisemita” en el mundo y urgió a pacificar Oriente Medio, destacando la importancia de perseverar en los “pasos significativos” que se están dando en las negociaciones de paz en Gaza.
Antes del rezo del Ángelus, ante miles de fieles en la Plaza de San Pedro, el pontífice estadounidense expresó su preocupación: “Expreso mi preocupación por el surgimiento del odio antisemita en el mundo, como lamentablemente hemos visto en el ataque terrorista de Manchester”.
Acto seguido, el papa manifestó su pesar por el “inmenso sufrimiento padecido por el pueblo palestino en Gaza”. En ese sentido, resaltó la apertura de una negociación indirecta entre Israel y Hamás para poner fin a la guerra.
"En estas últimas horas, en la dramática situación de Oriente Medio, se están cumpliendo algunos pasos significativos en las negociaciones de paz que espero que puedan lo antes posible alcanzar el resultado esperado”, solicitó.
El papa emplazó a todos los responsables a "comprometerse en esa vía, el alto el fuego y liberar los rehenes", y exhortó a los fieles a la oración para que los esfuerzos conduzcan a una "paz justa y duradera".
Mensaje de bienvenida y condena a la discriminación de migrantes
El papa León XIV también presidió la misa del Jubileo de los misioneros y migrantes en la Plaza de San Pedro. Durante su homilía, condenó la discriminación contra los inmigrantes.
"Esas barcas que esperan avistar un puerto seguro en el que detenerse y esos ojos llenos de angustia y esperanza... no pueden y no deben encontrar la frialdad de la indiferencia o el estigma de la discriminación”, sostuvo el pontífice.
Recordando su experiencia como misionero en Perú, explicó que la Iglesia debe llevar la fe a "aquellos que viven una historia difícil y herida", como los migrantes, quienes han abandonado su tierra, "atravesando las noches de miedo y de soledad, padeciendo en su propia piel la discriminación y la violencia”.
León XIV aseguró que la Iglesia encara una época misionera nueva, donde las fronteras no son solo geográficas, sino también afectivas y sociales, y cuyo objetivo es aliviar "el sufrimiento y el deseo de una esperanza mayor".
Para finalizar, dirigió un mensaje directo a los migrantes: “A los migrantes les digo: sed siempre bienvenidos... Les deseo encontrar este rostro de Dios en las misioneras y en los misioneros que encontrarán”.